Buenas noches, guerreros.
Sé que el tono de lo que os voy a decir ahora es un poco brusco, pero en ningún momento quiero que penséis que me he enfadado ni nada por el estilo. Tened en cuenta que las cosas, vistas desde fuera, se ven con otra perspectiva y que cuando uno está dentro, lo vive con más pasión. De nuevo, como tantas otras veces, quiero agradeceros vuestro punto de vista porque me hace ver las cosas desde una óptica distinta a la mía cuando sé que puedo estar cegada por cualquier factor.
@lila87,
@Luis78ESP y
@daim, de verdad, de todo corazón, muchas gracias por vuestras palabras.
Os voy a contestar en general y, si veo que es necesario, os nombro. A ver, me han metido en un departamento en el que no tengo ni puñetera idea de nada y ya me han dado unas responsabilidades que antes no tenía (hola, soy la que busca alojamiento a los operarios, vuelos, aves y todas esas cositas bonitas que son un quebradero de cabeza tremendo). Mi nuevo departamento es uno de los clave a la hora de trabajar en el "lugar de los hechos" (materiales y suministros, para que os hagáis una idea). Entonces, partiendo de la base de que la saturación de mi departamento es extrema (de 6 personas que había en enero, han quedado 3 y ahora me tienen a mí, pero que todavía estoy intentando adaptarme y hay procesos y proveedores que no controlo). Vale, me piden una tarde en semana (es lo máximo que voy a darlo, lo siento mucho, yo echo todo el puto año 42h semanales para tener mi maldita intensiva en verano). Por otro lado, pues digamos que yo entré cobrando un sueldo y por cuestiones de los maravillosos impuesto que nos cobra nuestro querido Estado, me han quitado cerca de 200 euros, cosa que, con la carga de trabajo que tengo, no me hace ni puñeterita gracia. Bien. Lo único bueno, que despidieron a mi antigua jefa y ya puedo "respirar tranquila". Ahora viene el problema gordo y es que no desconecto. Literalmente. Sueño con el trabajo, con pedidos, con facturas y todas esas mierdas. Y llevo tres semanas en el departamento, vamos a recordarlo. ¿Hay vida después del trabajo? Para mí, no. Sí, sé que soy joven, que apenas llevo dos años trabajando y esas cosas. Yo no tengo problema en tomarme algo con los compañeros después del trabajo. De hecho, los jueves estaba empezando a irme a comer por ahí con ellos y era agradable. También me tomo un café con alguno a media mañana y me relaja. Pero mi cabeza está todo el rato con lo mismo. ¿He mandado esto? ¿He puesto esto bien? ¿Se me está olvidando algo? Bueno, desde marzo del año pasado, estaba usando el método bullet journal (no sé si lo conocéis). Tenía un cuaderno donde iba apuntando cosas que necesitaba recordar, tareas pendientes, pensamiento, trackers, en fin, una forma de organizarme que me hacía la vida más sencilla. Desde que he entrando en el departamento, he dejado de anotar cosas en el cuaderno. Tengo otro en el trabajo para apuntar las cosas del trabajo porque no quiero (ni puedo) tener esas cosas en mi cuaderno personal. Con esto quiero decir que me está afectando mucho todo este gran cambio. Para mí no está siendo nada sencillo porque es un momento crítico para el departamento y del trabajo de los próximos meses dependerá el futuro tanto de mis compañeros como el mío, por lo que es mucha la presión que hay, unas veces directa y otras, indirecta. Me han sacado de una patada de mi zona de confort a un mundo hostil con el que no estoy acostumbrada a tratar y no me está resultando tan fácil adaptarme como puede parecer. Pero, con todo, intento mirar hacia adelante y seguir porque es lo único que me queda, seguir.
Respecto al tema del ejercicio, es que a mí me gusta levantarme temprano para entrenar. Es mi momento del día. No es una obligación, es un momento que me dedico a mí misma y que me hace sentir bien. No es la primera vez que hago esto. Hace dos años ya me levantaba a las 6 y pico para estar en el gimnasio a las 7. De hecho, lo estuve haciendo hasta que cambié de trabajo, justo hace un año, porque no me daba tiempo ya a ir al gimnasio antes de ir a trabajar, básicamente. En marzo, descubrí que el gimnasio que hay al lado de mi casa (casi literalmente) abría a las 6 y me apunté. Fui 10 días, hasta que empezó el confinamiento. Para mí, la mejor hora de hacer ejercicio es después de levantarme. Yo, a partir de las 12, ya voy buscando excusas para no mover el culo y como encuentre una medio convincente, lo mando todo a freír espárragos. Así que no tengo problema con levantarme temprano y hacer ejercicio. Pero tengo que tener en cuenta mis horarios, por supuesto, y me tengo que levantar como dos horas antes de irme a trabajar para poder hacer ejercicio, ducharme, desayunar con calma (básico y fundamental) y arreglarme para ir a la oficina. Como es lógico, tengo que acostarme más temprano, porque levantarse 40 minutos antes implica acostarse antes. Eso es así. Yo no voy a sacrificar sueño (otra cosa es que duerma de pena por el estrés y esas cosas) por hacer ejercicio. No estoy tan loca. Pero que tengo que acostarme antes está claro y que me gusta hacer ejercicio a esa hora, pues también.
Luego, lo del estudio y tal. Llevo como desde... febrero, creo, sin estudiar y me cuesta mucho ponerme. Además, es una asignatura a la que he cogido una animadversión extrema porque es horrible y completamente irracional (aunque el profesor piense lo contrario). ¿Me importa mucho? Pues no, la verdad. Tengo muy claro que si no me saco la asignatura de una vez, voy a pedir el tribunal de compensación y santas pascuas. Que llevo diez putos años con la carrera entre unas cosas y otras y estoy amargadísima de la vida con tema. Porque yo no he podido seguir el camino normal de una persona normal y cuando llevaba media carrera, tuve que dejar la universidad presencial. Como tampoco podía pagarme los años enteros, he ido haciendo asignaturas sueltas. Y aquí estamos, que puto odio muy fuerte ya todo lo que tiene que ver con la UNED y solo pienso en terminar de una maldita vez. Es lo que tiene que te toquen profesores como el mío. Espero que no tengáis esas mala suerte (con que no estudies el grado de Lengua y Literatura Españolas por la UNED vais bien - ni nada relacionado con la morfología). Total, que esto ya pues me hacer tener un poquito peor humor... El carnet del coche me corre prisa, pero tampoco le puedo pedir peras al olmo, así que me lo tomaré con calma. Espero, eso sí, a ver si antes de irme de vacaciones, por lo menos, me puedo presentar al teórico y ya veremos. Tampoco es algo que me preocupe demasiado, pero me desespera depender de los demás. Es algo que no me gusta en absoluto y es por lo que estoy más jodida, no tanto por el carnet, sinceramente.
Tema sueño, que lo he tocado arriba, pero no he terminado. Me comentas,
@Luis78ESP, que me eche la siesta, que priorice el sueño al yoga y tal. Bueno, yo llego a casa a las 15.30 (more or less). Entre que termino de preparar la comida, comemos y tal, me dan las 16.30. Entre unas cosas y otras, al final cuando me quiero acostar son las 17. Y yo no me echo una siesta de 30 minutitos, no, no. Yo me duermo entre hora y media y dos horas. Al final me levanto a las 19, con un palizón encima por el calor que da gusto. Ya a esa hora no tengo ni ganas de dar paseo (porque sigue haciendo calor y yo estoy cocidísima), ni tengo ganas de yoga, ni de estudiar ni nada. Hoy me he levantado a esa hora, sobre las 19, me he comido mi yogur griego para merendar, nos hemos puesto a ver un vídeo de youtube, he estado preparando algunas cosas para mañana, he dado de comer a los gatos y me he puesto a hacer la cena. ¿El resultado? Que no he estudiado absolutamente nada, no he aprovechado la tarde para nada y tengo la sensación de perder el tiempo de una manera flagrante. Que sí, que no todo el tiempo tiene por que ser productivo, hasta ahí llego, pero cuando yo estoy diciendo que quiero estudiar y no estudio, pues voy mal. Por eso no quiero dormir por la tarde. Al final me crea mala conciencia porque sé que no estoy cumpliendo con mis obligaciones (estudiar es una obligación, quiera yo o no quiera, tengo que hacerlo y punto) y luego, en contra partida, me cuesta un huevo dormirme por la noche. Además, si me acostumbro estos dos meses a hacer esto, en septiembre lo paso de pena porque a las 16 me pide el cuerpo cama y en la oficina, pues como que no se puede dormir muy bien, vamos. En fin, la solución es irse a dormir antes, aguantar el sueño como se pueda a mediodía y ya está. Otra cosa no me queda.
Con la comida tampoco es que me esté quemando demasiado. He puesto lo de los macros porque los carbohidratos me hacen sentirme hinchada, como os decía ayer, y es una sensación horrible. Estoy comiendo lo que suelo comer, cosas que me apetecen, pero tampoco estoy cuadrando los macros de manera exacta. Tampoco creo yo que con mi sobrepeso merezca la pena ponerse tan puntilloso. Con no pasarme tres pueblos los fines de semana y comer normal entre diario, ya voy sobrada.
@daim, aunque no te lo creas, últimamente mi pensamiento es ese, que por poco que avance, si ese progreso se mantiene, de aquí a un año puedo estar muy bien, solo hay que ser constante.
Por cierto, que se me olvidaba.
@Luis78ESP, aunque yo os diga que quiero hacer yoga y tal, pues sé que mi tiempo es limitado y me vale con hacerlo el domingo, que es cuando tengo tiempo. Pero necesito desconectar y relajarme y no encuentro absolutamente nada que me haga quitarme las preocupaciones de encima. El yoga es un intento de ello, pero con las limitaciones que tienen mis horarios.
Me comentáis lo de las tareas domésticas. Cuando empecé a trabajar le dejé muy claro a mi novio que yo no iba a pasarme el día fuera de casa trabajando y luego me iba a poner a limpiar. Yo no me paso 12 horas diarias fuera de mi casa para emplear mis fines de semana limpiando, haciendo la compra y cocinando. Me niego, vamos. Así que decidimos contratar a alguien. Se lo dijo a su madre porque no se fía de que venga una extraña a casa. Mi suegra aceptó y viene dos veces en semana a limpiar (y le pagamos por ello, como digo). Con todo, sigo teniendo cosas que hacer en casa, pero la carga grande de trabajo no la tengo, así que por ahí me alivia un poco. Pero, vamos, que comprar y cocinar sigo teniendo que hacerlo y me ocupan mucho tiempo. Menos mal que los domingos hago alguna cosilla para la semana y eso que me ahorro otros días....
Bueno, dicho esto, os voy a dejar el menú porque no me quiero enrollar más. Hoy se me ha hecho eterna la mañana, los minutos pasaban lentos a pesar de estar ocupada todo el rato. Lo único que quería era llegar a casa y, cuando he llegado, lo único que he hecho ha sido dormir. Me siento mal porque no estudiar, por estar usando mis tardes para dormir, cuando sé de sobra que debería ponerme con otras cosas. Insisto de nuevo, sé que no todo el tiempo tiene que ser productivo, pero necesito ser productiva para poder sacar mis cosas personales adelante. Ahora mismo solo me son útiles las horas laborales y no creo que la vida sea eso. Pues eso, que no me enrollo más y os dejo el menú: