¡Muy buenas, guerreros!
Año nuevo, vida nueva suele decir el tópico, ¿no? Y no, no me he vuelto loca, ya sé que estamos en septiembre, pero veo mucho más razonable comenzar el año escolar que el año sideral (aunque, con ese nombre, mola más, ¿verdad?). En fin, en cualquier caso, aquí estamos, para comenzar de nuevo haciendo borrón y cuenta nueva.
En un principio, tengo el plan poco estructurado y es muy probable que surjan mil y una modificaciones a lo largo de las próximas semanas, sobre todo a partir del 9 de septiembre, que empieza mi verdadero periodo vacacional (dejo de tener obligaciones académicas hasta octubre, cuando comienza el cuatrimestre de la UNED). Por ahora, mi objetivo es simplificar la comida lo máximo posible, pero sin que llegue a ser monótono y aburrido. En cuanto al ejercicio, me conformo con ir, al menos, 4 o 5 días al gimnasio (dos de spinning y tres de natación). Según vea, iré metiendo alguna rutina de ejercicios de fuerza, como sentadillas, ejercicios con pesas ligeras (mis mancuernas de dos kilos me están esperando ansiosas), abdominales y cosas así. Y en lo que se refiere al peso, tengo el objetivo claro para Navidad: 56kg. Son 9kg menos que ahora mismo, lo que es perfectamente factible, sobre todo cuando los últimos tres o cuatro kilos han sido cogidos en poco más de dos meses. Espero que se vayan igual de rápido que han venido.
Datos inicialesDe momento, voy a pesarme cada dos semanas. Se ven muchos más resultados, sobre todo en las medidas. También intentaré que la comida trampa coincida con ese día, así no afectará a la objetividad de los datos.
En fin, espero poder llevar el diario actualizado y dejar todos los días los menús, que es algo que siempre es de agradecer por vuestras opiniones y mi siempre curiosa mirada al pasado.
¡A por ellos!